La escuela de oficios Joseph Tantet Dubruiller devino piedra fundacional del abrazo, inaugurada tras cuatro años de "aprender haciendo" como máxima de sus adiestrados. De esta forma abre sus puertas a la eternidad patrimonial toda vez que comparte la génesis de nuevos convenios.
"Este, en específico, nos obligó a asumir una dimensión nacional -explica Víctor Fernández, presidente de dicho grupo. Al principio solo éramos una asociación de París; pero las exigencias del trabajo precisaron la intervención de otras regiones y empresas con accionar afín a la restauración. Esta dinámica dio origen a la Red de los amigos de Cienfuegos, trascendiendo cualquier localismo.
"No enfrentábamos un quehacer puntual, sino de gran envergadura y buscamos entidades dispuestas a colaborar con la escuela. Así comenzamos un período donde también nosotros aprendimos mucho -asegura. Antes se consideraba la cooperación como un añadido, mas la incorporamos como parte integral. Ya vimos los primeros resultados y nos estimula a ir un poco más lejos. Incluso motiva a algunas corporaciones, escépticas al inicio".
Contribuir al mantenimiento de la condición de Patrimonio Cultural de la Humanidad denota prioridades, mas el alcance social del lazo también ocupa protagónicos:
"Participamos en la inauguración de tres casas de abuelos, proyectos de aguas para un barrio de Lajas, la apertura del Teatro Tomás Terry, el alumbrado público del Centro Histórico de la ciudad cabecera, labores en la finca del Gallego Otero... Para la concreción de las mismas contribuyeron, de manera puntual, varias entidades galas y por ello estamos muy orgullosos. Nos gratifica saber que benefician a la población.
"Ha sido notoria la influencia de Cienfuegos en el acontecer francés; de ahí el gran número de obras en ejecución -anuncia. Actualmente tenemos 23 en todo el país y 16 de ellas en la Perla del Sur. ¿Por qué tamaña deferencia?: pues lograron una estrategia de desarrollo local y a nivel de provincia, con una correcta asesoría, seguimiento y coherencia.
"Tenemos ramificaciones en otros lugares de Cuba, como por ejemplo en La Habana; pero debemos reconocer la organización y constancia de los sureños. En estos momentos, los trabajos aquí acometidos son los más importantes de nuestra cooperación en la Isla y no lo digo yo, sino nuestra misma embajada.
"Por eso nos enfocamos en crear nuevos comités de ayuda en otras regiones, con un doble objetivo: primero, hablar de la realidad cubana sin glorificar ni demeritar, sino en justa medida; y segundo, encontrar financiamiento para futuros planes. En septiembre próximo, la Fiesta de la Humanidad nos ofrece la ocasión perfecta para tales fines.
"Se trata de presentar una muestra en un pabellón de unos 500 metros cuadrados con los temas cultural, político y de cooperación -señala. Figura como escenario idóneo para presentar logros e incluso Cuba podría mostrar allí su concepción de dichos acápites. Al evento asistirán más de 500 mil personas, empresarios en su mayoría; nuestro momento para decir: 'vean, miren lo que hacemos y ayúdennos'". (Darilys REYES SÁNCHEZ)
Todo proyecto humano merece prestarle atención para consideración y cooperación.
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