Periodismo Televisivo
Damaris Leyva Feijóo:
"Me considero una guerrera incansable"
La televisión de Cienfuegos, histórico
hervidero de periodistas - talentos desde los inolvidables tiempos informativos
del maestro Omar George, encontró en Damaris Leyva Feijóo la gema en bruto
pulida en los avatares diarios del medio y convertida con el tiempo en una de
sus principales figuras.
Obsesionada con su trabajo, rigurosa a grado
extremo, dotada de esa sagacidad natural que perfeccionó mediante el estudio,
ella hace rato que pasó de ser periodista integral del telecentro Perlavisión
para autoconstituirse en la colega reconocida a lo largo de todo el país por su
capacidad profesional.
Su material Al pie de la horca representa la
más rotunda muestra de reportaje que la Televisión Cubana completa parió en
2014 y no hay aquí, créanme, mínima pizca de exageración. Lo sabe quien rastrea
el medio.
No le fue fácil alcanzar lo que es hoy —lo
refiere ella misma—, porque ni estudió la profesión (es Licenciada en Español y
Literatura, y todo apuntaba en sí para ejercer el magisterio); ni tuvo
experiencias previas en el oficio, pues su misma esencia campesina se lo
impedía.
Recién parida y mudada de Horquita a
Cienfuegos durante finales de los '90, comenzó a adentrarse en el medio a
través de cursos que la llevaron a atravesar la radio en su camino hasta
Perlavisión, en cuya nómina inicial no le fue posible entrar; sí al poco
tiempo.
Desde su mismo estreno en la planta empezó a
capacitarse hasta la actualidad, pues el pasado año se evaluó de directora de
programas, perfil que le atrae explorar si bien no de manera inminente, en
tanto confiesa que aún no se siente preparada para abandonar la faena cotidiana
en la calle: "Todavía no puedo apartarme del periodismo reporteril; es
donde me siento mejor, me apasiona ir a los lugares, descubrir historias e
investigar. El mecanismo con el que mejor palpas la realidad cotidiana es yendo
al epicentro de los hechos".
Ella disfruta el hecho periodístico, pues tal
cual dice, "le sigo la pista a mi trabajo hasta que esté publicado. Me
place su salida en cualquier espacio de emisión, aunque verlo a las ocho de la
noche no solo constituye gran gozo, sino también la constancia de que cumpliste
con una responsabilidad".
Su género preferido es el reportaje y 2014
dio buena fe de que lo ejerce con donaire, estilo y sobre todo mucha pericia.
La propia ganadora del Premio de Periodismo Provincial Juan David por la obra
del año en Televisión lo narra para los lectores: "Este año fue bastante
exitoso para mí. En el Festival del Telecentro obtuve primer lugar en Reportaje
Seriado con Dueños de precios —en torno a los cambios arbitrarios de gravámenes
en las distintas cadenas de tiendas— y primer lugar en Reportaje con Al pie de
la horca (sobre dificultades en la Empresa Henequera de Juraguá, también
recompensado con el Premio de Periodismo Económico, entre otros lauros), más un
segundo lugar en Información. Además, alcancé mención en el concurso 26 de
Julio gracias a Dueños…, y Al pie… fue Premio de Reportaje en el Festival
Nacional y la Convención Internacional de Televisión: el mayor lauro de mi
carrera".
Asegura que se decanta por tal modalidad
periodística porque le permite cubrir un amplio abanico de temas a partir del
diálogo con el hombre, pero además, incorporando sus juicios para arribar a una
conclusión.
"Amén del mencionado, me atrae el
Testimonio; en realidad no pretendo ser buena en todos los géneros. No creo ser
una periodista tan talentosa, me considero más bien una guerrera incansable que
lucha por lo que quiere. Mis resultados han sido progresivos y sobre la base de
mi sacrificio personal y de mi familia. Nada me llegó fácil, nada se me ha
regalado e incluso creo que a veces fueron injustos conmigo. Ello ha sucedido
con años de labor o trabajos de calidad, que sin embargo no recibieron ningún
reconocimiento: así son los concursos y los respectivos jurados con sus
respectivas sensibilidades", dice.
A madera de despedida, a quienes deseen saber
más de la personalidad de esta formidable mujer, ella les regala un sucinto
autorretrato: "Todo en mí está ligado a mis raíces campesinas y por tanto
siempre he enaltecido la labor de estos, así como la de los obreros y todos
quienes se esfuerzan y sacrifican. Soy una eterna inconforme de cuanto hago:
pese a estar feliz por haber logrado algo, irremediablemente creeré que pude
haberlo hecho mejor. Disfruto cuando otro compañero tiene la oportunidad de
merecer un premio tanto como yo; amo y vivo para mi esposo, mi hija y mis
padres. Creo en la Revolución, sé que perfeccionaremos el proceso y los cubanos
nunca nos dejaremos engañar por cantos de sirena de nadie. En esa fe vivo y así
consolido mi existencia".
Periodismo Digital:
Sabdiel Batista Díaz: Una
acción fecunda en el universo digital
Él, junto a otro reducido grupo de
compañeros, figura en la pirámide de dicha faena aquí. Quehacer este asumido
por el editor web con meticulosidad e intencionalidad. A Sabdiel le consta
cuánto está en juego en la batalla ideológica; o mejor dicho, en la respuesta
patria a la guerra cultural planteada contra las formas de pensamiento
contrarias por el principal centro de poder de la humanidad.
De tal manera, sabe que nuestros espacios y
recursos precisan emplearse de la forma más provechosa e inteligente, sin
incurrir, por la razón que fuere, en ingenuidades políticas que eventualmente
puedan revertirse en verdadero boomerang.
Por lo anterior "proyecto, pienso y
ejecuto con arreglo a la intención primera de amplificar la imagen Cuba desde
la posición de quienes la defienden, sabedores de las sombra inherentes a todo
proceso, pero bien claro de la inmensa claridad de su luz", afirma en
diálogo con CINCO de Septiembre digital.
No obstante, está consciente de que la
batalla en el terreno digital a nivel masivo "demanda de un inexcusable
primer paso, que sería casi una campaña de alfabetización digital, pues existen
muy pocas personas en Cuba conocedoras de cómo enfrentarse a un público
diferente. Los profesionales de la
prensa tienen adelantada parte de la batalla debido a cursos, superación…, pero
lo primero es preparar al resto de las personas. Lo segundo: que estén
conscientes de que van a emitir un mensaje a ser analizado, separado en piezas
por otro lector no poseedor de los códigos, la formación, la perspectiva de
cómo funcionan las cosas en nuestro país".
"Nosotros, los cubanos de aquí, somos
los indicados para amplificar la cotidianidad nacional y no dejar que otros
ajenos —en buena parte de los casos desconocedores de nuestra realidad—, asuman
la tarea", afirma el entrevistado.
Batista Díaz comprende el fenómeno desde
todos sus ángulos. Aunque constata la preeminencia del periodismo digital,
razona que "la primera carencia para trabajarlo con la eficacia que
requiere en nuestros medios es la dificultad de conexión a Internet y la escasa
presencia de computadoras. Podrás tener muchos conocimientos sobre un tema
determinado, pero si careces de la herramienta tecnológica para amplificarlo no
harás mucho; al menos en este universo.
"Otra ausencia pasa por el hecho de que
las últimas tendencias o innovaciones digitales necesarias a los efectos del
trabajo, los cubanos no podremos llevarla a la práctica en tanto estamos
limitados aún por el bloqueo norteamericano para el acceso a diversas
herramientas", acota.
También merecedor del "Juan David"
en 2010, el Licenciado en Periodismo dirige la versión digital de Perlavisión,
bajo cuya égida se ha agenciado distinciones nacionales e internacionales. Y
mantiene tres blogs. Cienfuegos Patrimonio, relacionado con los valores
culturales e históricos de la localidad; Proyecto Luna, más especializado, va
en esencia sobre tradiciones marineras de Jagua; y Letra Nueva (con el cual más
me identifico y siento ligado a mí), que incorpora materiales de tecnología,
política y periodismo, entre otros campos temáticos”, comenta.
"Desde mis comienzos en la profesión
buscaba una forma de hacer periodismo que no solo me diera la oportunidad de
redactar la noticia y entregarla, sino además de redactarla, diseñarla,
colocarla en una plataforma creada por mí: la misión digital me concedió tal oportunidad",
recuenta, satisfecho, el joven talento.
Encontró la forma de hacerlo
merced a sus bitácoras personales y, fundamentalmente, el portal de
Perlavisión, en cuyo rediseño visual, cambio de plataforma y modificaciones del
flujo de información de la redacción digital labora ahora. Más adelante, forma
parte de sus proyectos la realización de una multimedia sobre el trabajo de
género, de conjunto con varios periodistas, según adelanta.
Periodismo Gráfico
Yariel Castillo Ortiz: el
camarógrafo orquesta de Perlavisión
Yariel Castillo Ortiz, camarógrafo de
Perlavisión, telecentro de Cienfuegos, quien por dos febreros continuados acoge
la merecida alegría del Premio Provincial de Periodismo Juan David en virtud de
la obra del año (a recibirlo en marzo, durante las festividades por el Día de
la Prensa Cubana), tiene varias cualidades, pero las primeras que lo definen
son su laboriosidad constante y el talento y la disciplina para saber responder
a cuanto se le pide tanto con la dignidad artística como con la diligencia
adecuadas para cumplir de forma exitosa su misión.
El director francés Jean-Luc Godard, pieza
indispensable en la articulación y comprensión del lenguaje audiovisual
contemporáneo, aseguraba que "dónde plantar la cámara es una decisión
moral". Yariel opina que, además, constituye una gran responsabilidad
creativa, en tanto la pericia de las tomas pueden encumbrar o destruir
determinadas premisas conceptuales.
Pese a la juventud de sus 35 años, se ha
granjeado el respeto de los realizadores del canal Perlavisión, quienes
aprecian en sí al profesional serio, responsable y eficaz, quien posee la
capacidad para respaldar en la imagen los conceptos suyos preconcebidos en
torno a disímiles motivos temáticos.
"Escucho a todos los directores. Me
empapo de la idea, del objetivo que pretenden y de forma automática me propongo
articular una proposición visual que encuentre correspondencia con tales
estrategias. Ya he generado tanta compenetración con algunos, que la puesta de
acuerdo entre ellos y yo se realiza de forma muy rápida", afirma el joven,
ganador de diversos lauros durante 2013 y 2014.
Al lector le bastará comprobar el ajetreo
permanente de este muchachón, si revisa los créditos de la programación diaria
de la planta. Uno podría sugerir, sin exagerar, que prácticamente el área de
Programación es suya, de atender a que trabaja en Semilla nuestra y Cubanos de
Cienfuegos, de Jorge Luis Marí; Y llegó el punto cubano Rita y Ojo Crítico,
dirigidos por Rita Arbolay Abdo; Aquí y ahora, de Tania Rivera; Cercanías,
Contrarreloj y Mostachón y sus amigos, bajo el mando de Aday Pérez; Intermedio,
realizado por Silvio Benítez; A buena hora, conducido por Eviecer Tamayo; y Cuentas claras y Detrás de
la noticia, de Boris Luis García Cuartero, entre otros.
Como todos los creadores, posee sus
dilecciones e igual sus desdenes. Prefiere, por arriba de todas las
filmaciones, a las deportivas, aunque confiesa que no le agrada demasiado
trabajar el béisbol: "la pelota es muy cansona; la filmación resulta
reiterativa, pues debes repetir muchas tomas".
Estima que cada universo genérico requiere un
lenguaje distinto y que el camarógrafo debe estar preparado para
comprenderlo/asumirlo desde una posición tan maleable como activa.
A sus nuevos colegas, ya sean los recién
afiliados a la nómina de la estación local o a cualquiera otra entidad, Yariel
les regala el fraternal consejo de "que sepan combinar paciencia y
comprensión, amén de ver mucha televisión. Para aprender nuestra profesión
debes consumirla a partir de un punto de vista profesional (comprobar la
secuencia de los planos, los cortes, ángulos, iluminación…): es algo que me
enseñó siempre Francisco (Paco) Ruiz, quien siempre ha sido mi escuela
formativa. Adquieres un gran bagaje observándola con vocación de
aprendizaje".
Respecto al quehacer diario con los
reporteros en el área de Información —actividad la cual en realidad es la que
menos practica ahora mismo debido a su aporte cotidiano en tantos espacios,
pero de la que también tiene rica experiencia—, cree que el cámara, "sin
renunciar por supuesto a ventilar sus sugerencias, ha de interpretar y respetar
lo que el periodista quiere, porque este es un trabajo de mucha unidad. Lo
anterior se manifiesta tanto en la realización del material como luego en la
cabina de edición. Se trata de un quehacer colectivo donde debemos apoyarnos,
pues a la larga todos dependemos de todos. Es la verdad final del asunto".
Cosas de la vida, se corrió el riesgo de que
el camarógrafo orquesta de Perlavisión no hubiese anclado nunca en su
profesión, en tanto hubo un momento de su vida en que parece que el destino le
tiraba para bombero. No obstante, cierto día —casi en los momentos de apertura
de la planta—, llegó al canal cienfueguero de la mano de su padre, quien pidió
le hicieran una prueba en la casa de la imagen. Justo de su progenitor (Héctor
Castillo Toledo, nuestro compañero del periódico CINCO de Septiembre) heredó
Yariel la seriedad, el compromiso y la tenacidad creativa. Son virtudes que,
cuando se unen al talento, suelen conducir a la victoria en cualquier empeño.
Prensa Escrita
Alexis Pire Rojas: La
emoción de escribir su tiempo
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Alexis Pire Rojas llegó en septiembre de 2012
a la redacción del Cinco y desde el primer día vislumbramos en él los bríos
propios del recién graduado, ese que se estrena en el universo laboral con la
energía y las ganas de dejar una huella perdurable. Por segunda ocasión
consecutiva alcanza el Premio Provincial Juan David por la obra del año el
cual, junto a otros galardones, vaticinan en él a un reportero de nutrido palmarés.
“Mi vida laboral comenzó de una manera
bastante intensa, creo yo, y no fue buscando los premios ni nada por el estilo,
sino por ese ímpetu con los cuales uno viene de la Universidad, por los deseos
de hacer buen Periodismo.
“Creo que para un joven, con apenas dos años
y medio de graduado, estos reconocimientos representan una gran responsabilidad
porque le ponen a uno la parada bien alta para seguir el camino, quedar bien
con los lectores, con quienes te siguen y están acostumbrados a leer de tu
firma trabajos más o menos profundos, con un lenguaje ameno, con tu propio
estilo…Pueden, incluso, convertirse en un peso en algún momento, pero aceptarlo
como un peso significaría también cierta cobardía, y no debe ser así. No
podemos mantener el mismo ritmo todo el tiempo, pues necesitamos sortear otras
dificultades y subjetividades. El trabajo intelectual no es mecánico, depende
mucho de las circunstancias, de cómo te sientes para escribir, de la motivación
y eso a veces hace que no produzcas igual en todo período”.
¿Crees que exista una forma joven de hacer el
Periodismo?
“Existe una manera contemporánea de hacer el
Periodismo, no necesariamente joven. Las personas de cualquier otra edad pueden
atemperarse a las maneras más actuales de asumir esta profesión. No tiene que ver con la juventud, ni siquiera
con la formación académica, sino con el talento, el olfato periodístico…”.
En tu opinión
¿qué está pidiendo la coyuntura actual del país de los reporteros y medios de
prensa?
“Hemos trabajado mucho en eso y el Periódico,
según mi criterio, de alguna manera se ha mostrado bastante consecuente con la
idea de que el Periodismo se parezca más a la realidad cubana. También
necesitamos contextualizarnos en nuestro tipo de medio, somos un semanario
provincial y ello impone explotar las necesidades, las situaciones del
territorio, de sus municipios, de los cuales a veces nos falta
representatividad.
“Y no se trata de cumplir con los caprichos
de algunas personas, quienes en ocasiones quieren divulgar comentarios
infundados, problemas muy particulares de cada cual, asuntos no publicables en
la prensa, pues existen otros mecanismos para solucionarlos. No obstante, nos
falta bastante para llegar a satisfacer nuestro cometido de parecernos más a la
cotidianidad y lograr que los intereses del Partido –de quienes somos órgano
oficial-, del pueblo y del Cinco vayan en una misma dirección”.
¿En qué lugar colocarías la superación, la
auto-preparación de los periodistas?
“Resulta fundamental, sobre todo en la
relacionada con las nuevas tecnologías, si tenemos en cuenta que las tendencias
actuales exigen la integración de todos los soportes. Son muy importantes
también los cursos de superación en función de la especialización periodística.
Digamos, el encargado de atender Deporte debe tener tanto conocimiento como un
comisionado del INDER, de manera que sin un día se necesita el criterio de un
experto pueda ser llamado para eso. Lo mismo digo para quien escribe de Salud,
Agricultura, Ciencia…”
“Eso va más allá de la sectorialización, aunque
guardan relación. El hecho de responsabilizarse por un sector, conocer sus
fuentes, sus interioridades, ayudan a especializarte, a organizar el trabajo,
pero no pueden convertirse en una camisa de fuerza. El periodista debe
aventurarse a explorar nuevos horizontes y abordar diversas temáticas de
importancia para la población, siempre con respeto a los colegas”.
Alexis se cuenta entre esos que se prueban y
por tal razón no se circunscribe a hablar de los avatares de la montaña, la
producción del café, el precio de la carne de cerdo…Con idéntica pasión alerta
sobre irregularidades en el pago a ciertos trabajadores; da fama a riquimbilis
y mulos; nos acerca a los desafíos de la ancianidad; diserta sobre asuntos
económicos; o nos hace reír, para no llorar, con una imaginaria reunión de
alimentos.
¿Con
cuáles géneros te sientes más cómodo?
“Siempre me ha gustado el comentario: una
herramienta a manos del periodista para dar a conocer su punto de vista sobre
determinado fenómeno. Es, además, muy riesgoso, porque al basarte prácticamente
en tu criterio, lo cual no quiere decir que dejes de investigar, corres el peligro de ser malinterpretado o de
suscitar distintos razonamientos de una misma idea. Pero esa diversidad de criterios
es muy provechosa. Yo lo disfruto mucho.
“Otro género que me agrada es el reportaje,
sobre todo cuando uno logra contrastar bien las fuentes y descubrir
problemáticas, insuficiencias, a partir de sus propias contradicciones. Y la
entrevista, sobre todo a hombres y mujeres supuestamente comunes, cuyas vidas
cotidianas pueden parecer intrascendentes y, sin embargo, en verdad son muy
interesantes. O sea, conversar con esas personas, lograr la necesaria empatía
para que me cuenten sus historias, hacerlas sentir importantes y que luego vengan
a contarme cuán prestigiosos se sintieron, me motiva en gran manera. Aunque en
sentido general me gusta incursionar en todo. Es bueno escribir de vez en
cuando una crónica, informaciones, reseñas…”.
Según dices, cuando entrevistas a alguien te
place adentrarte en su vida, sus rutinas. ¿Cuáles son las tuyas?
“Yo busco mucho divertirme y eso complementa
el trabajo. Cualquiera pensaría que estoy todo el tiempo ocupado, por mis
diversas responsabilidades, pero siempre encuentro tiempo para distraerme,
reírme, ir al cine, al malecón, una discoteca, compartir con mis amigos…”.
A pesar de
tus cortos años de experiencia, ¿cuál consideras hasta ahora el momento más difícil en tu carrera como periodista?
“Precisamente, cuando tengo pocos deseos de
escribir. No es frecuente, claro. En mi opinión, a todos los que nos dedicamos
a la creación nos pasa eso alguna vez, no siempre uno tiene ánimos para
redactar cuando se impone hacerlo, lo cual no significa un mal resultado, pues
ahí entra a jugar su papel el oficio que uno va adquiriendo.
“Los momentos de encontronazos con las
fuentes cuando no están de acuerdo con algún trabajo pueden parecer difíciles,
pero en el fondo son parte de nuestra cotidianidad. Si a alguien no le gustó el material o si resultó polémico
revela que trascendió y entonces no lo considero un percance.
¿Y los
instantes de mayor regocijo?
“Cuando un viernes a penas a las 9:00 AM o a
las 12:00 PM ya me han llamado
muchísimas personas o me han parado en la calle para hablarme bien de un
trabajo mío (ahora se escucha temblorosa la voz, mientras se le humedecen los
ojos). No te voy a engañar, ni andar con falsas modestias. A mí sí me agradan
los premios y algunos me han traído enormes satisfacciones. Hay dos en
particular que he disfrutado muchísimo: el del Concurso 26 de Julio en 2014, en
reportaje, considerado el rey de los géneros periodísticos, y el Primero de
Mayo de ese mismo año”.
¿Qué es
el Periodismo para ti: necesidad o elección?
“Las dos cosas. Necesidad porque uno siente
siempre la urgencia de exponer sus criterios, retroalimentarse con los
lectores, escribir de cualquier cosa, aunque no sea publicable. Y es también
elección por la manera en la cual uno elige hacerlo: si va a ser mesurado, más
profundo o va a quedarse en la epidermis.
“Yo no me arrepiento de ejercer esta
profesión, a pesar de ser tan mal remunerada. Me siento bien y en mi opinión
eso pasa cuando uno sabe escoger la carrera a estudiar. Desde 10mo grado me di
cuenta de mi inclinación por la escritura, por inventar historias y vi en el
Periodismo algo cercano a eso, a comunicar, a trabajar en la TV, otro de mis
placeres. Algunos me preguntan por qué
no estudié Medicina, por ejemplo, y yo ni siquiera lo pienso. No me hallo médico, me hallo periodista, fue
mi decisión y no creo haberme equivocado. Si el destino me puso aquí y si en
dos años y medio he tenido resultados no debe ser por gusto”.
¿Qué
cualidades definen a Alexis?
“Creo ser bastante sincero y transparente en
relación con mis compañeros. Yo no siento envidia, cualquier buen trabajo o
logro de un colega lo celebro porque pienso en el derecho y la capacidad de
todos para obtener reconocimientos y eso no debe molestar a nadie. ¿Otra
cualidad? me place ayudar a la gente, hacer el bien sin pensar en el
agradecimiento o la retribución. Eso me gratifica espiritualmente, así como la
dicha de tener excelentes amigos, personas muy buenas y sanas a mi alrededor (y
otra vez la emoción se adueña de sus palabras)”.
Los pasos de Alexis no solo dejan rastros en
el Cinco, sino también en la TV local. “Ese es mi paralelo y si me siento bien
ahora profesionalmente es porque hago cosas realmente gratificantes: escribir
para el Periódico y trabajar en la conducción de programas, lo cual me ha
enseñado y abierto muchas puertas. Todo en cuanto he podido incursionar me ha
llevado a enamorarme y disfrutar más ese medio. Aunque me atrae desde mi época
de estudiante, no he tenido mucha oportunidad de hacer con frecuencia
Periodismo televisivo, pero lo valoro y lo considero encantador”.
Este joven cienfueguero signado por la sencillez
y la laboriosidad, que seduce a los lectores con su verbo diáfano y desenfadado
es, ante todo, un ser sensible y por eso vibra ante las confesiones de una
educadora admirable o mientras responde a las preguntas de esta reportera. Y es
quizás la emoción de poder escribir su tiempo el sentimiento al cual se aferra
en su afán por asimilar las circunstancias del presente y reflejarla en sus
textos.
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