Como un acto performático,
sin la guía de un artista propiamente dicho, pudiera calificarse al fenómeno
social y comunicológico que hoy se desprende de las zonas conectadas a Internet
a través de la WiFi
en Cienfuegos, vía de acceso que ha cambiado la percepción del mundo para los
cubanos.
Ya no nos imaginamos otras
ciudades, otros mercados, otras puestas de sol; ahora, existe diversidad de
aplicaciones vinculadas al ciberespacio se acortan las distancias y sitúan a
los medios tradicionales de la información en franca competencia ante la
inmediatez producida desde la red de redes.
Aun cuando la plataforma
Nauta, de la Empresa
de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA), no es todavía usada masivamente por la
población, las estadísticas apuntan a un aumento de usuarios por día. Hoy
existen en Cienfuegos más de 55 mil 296
cuentas permanentes, las cuales pueden ser de navegación internacional con
correo, navegación nacional, o esta última con correo. “En menos de un año se
redujo el precio del tiempo de conexión a 2 CUC la hora. Puede recargar su
cuenta desde el exterior, transferir saldo, ponerle cupones (…) Las permanentes
son más personalizadas, mientras que las temporales caducan al mes, están
diseñadas para extranjeros”, dijo Yusnel
Díaz Fernández, jefe de Grupo de Mercadotecnia de tal entidad en Cienfuegos.
WiFi-ETECSA no constituye un
nuevo servicio, sino otra vía de acceso para la comunicación, de la cual no
podemos prescindir en el siglo XXI.
I
“Tres días para crearme una
cuenta nauta en el punto de ETECSA del Bulevar, el servidor caído. Después debí
pagarle 3 CUC a un cuenta propia que arregla móviles para la configuración del
correo electrónico en el teléfono; por cierto, ellos mismos me indicaron a donde
ir, como si fuera un negocio redondo. No ofrecen casi información en las
oficinas sobre el uso de Internet, te dan el contrato y se acabó (…) Cuando
llegas al parque Martí, por ejemplo, están quienes pasan aplicaciones, abren cuentas en Facebook, alquilan desde laptop hasta audífonos, te conectan por
1 CUC la hora (...), si pagas te facilitan el camino”, comentó Marielena
Rodríguez Caballero, asidua a las áreas WiFi.
Algunos puntos de ese
criterio son explicados por Lucía Rosell Montero, jefa del Grupo Comercial del Centro
de Telecomunicaciones: “desde todos los puntos se crean cuentas, pueden
activarlas y recargarlas luego, trabajan entre semana hasta las 4:00 p.m. y los
fines de semana hasta las 11:00 a.m.; mientras, el Telepunto y el de la Terminal se extienden hasta
las 7:00 p.m. (…) Al principio hubo baches y ocurría que las operarias acumulaban
diez números de móviles para entrarlos al sistema; por supuesto, eso traía
molestias porque no podías usar la cuenta inmediatamente después de salir de la Oficina Comercial.
Ya no es así”.
En Cuba circula una amplia variedad
de móviles y “no podemos asumir esas configuraciones, ahí está la Resolución 8 del
Ministerio de las Comunicaciones, donde queda claro que solo configuramos los
comercializados por nosotros”, agregó la funcionaria.
Un 30
por ciento de los celulares activos en el territorio nacional han sido vendidos
por ETECSA, lo cual no significa que las personas no vayan a comprar a la única
empresa de este tipo existente en el país, sino que casi nunca están surtidos
los establecimientos donde los deben ofertar. Según autoridades del sector pasa
por un problema de inversión, y añadiríamos: de competencia también. Por
ejemplo, a los extranjeros no les pueden vender móviles, porque el sistema solo
acepta números de carné de identidad cubanos, ello los empujan a la ilegalidad.
Ya en 2015 se contrataron
más de cinco millones de cuentas nautas, entre temporales y permanentes en
Cuba. Actualmente, según el periódico Granma, son activadas unas 2 mil
@nauta.cu por día y mil 200 servicios celulares. Tal incremento no debe
convertirse en justificación ante las insatisfacciones de los usuarios, quienes
se preguntan: ¿Por qué no se amplió la capacidad de los servidores con anterioridad?
¿ETECSA no previó que fuera así el fenómeno?
En las áreas de acceso
inalámbrico a Internet no existe una infraestructura de ETECSA permanente, aunque en Cienfuegos ya podemos
visualizar a grupos de instructores WiFi que brindan asesorías.
“Hay colas en las oficinas.
Muchas personas prefieren para recargar ir allí, porque desconocen otras vías o
porque económicamente les resulta mejor. Esa aglomeración impide que las pocas
trabajadoras brinden información y recomienden buscadores o páginas web que
faciliten una optimización de la hora comprada por el usuario. Yo prefiero WiFi
y no las salas de navegación, en estas últimas no se puede oír los videos
descargados, es más lento”, dijo un cienfueguero.
Una vez creada la cuenta y
vinculados al ciberespacio comienza a correr el tiempo.
II
En la provincia existen
cuatro zonas conectadas a Internet por la vía de acceso WiFi: el parque José
Martí, con alcance hacia el Bulevar y calle 29; la zona del Malecón en Punta
Gorda; el parque Villuendas, y Cruces.
“Por cada usuario se asegura
un ancho de banda de 1 megabits por segundo. Es una conexión bastante holgada y
resulta difícil que descargando o abriendo aplicaciones lleguen a consumirla ni
a la mitad (…) Nosotros hacemos pruebas mensuales y hasta ahora no hemos notado
problemas de desconexión”, afirmó el ingeniero Alvin Cordero Hernández,
especialista de soporte a la red.
Una insatisfacción que
aflora una y otra vez es que la señal WiFi no llega prácticamente a la segunda
cuadra del parque Martí. “Quisimos poner
uno de los puntos de acceso al otro lado de la cúpula, pero no se conectaba porque
el cable no llega hasta allí. La oficina de Comunicaciones está en la parte de
atrás del Gobierno Provincial, y el
cable no da hasta el otro lado de la cúpula (…) Queremos dejar la opción y, por
eso, vamos a retomar el trabajo”, afirmó Cordero Hernández, sin embargo, un
mes después todo igual.
La mayoría de los
entrevistados se refirió a que llegó tarde la opción, debió aparecer antes. “Lo
usan para comunicarse fuera de Cuba. No saben de metabuscadores, ni de Youtube,
ni de sitios de noticias, ni de Twitter. Está caro el servicio Nauta y, por
eso, se limitan a recrearse o utilizarlo para trabajar (…) Hotspot, una
aplicación instalada en mi PC, permite crear una red donde comparto mi hora de Internet
con cinco o seis usuarios, a cada uno le cobro 1 CUC la hora. Todos salimos
felices…”, confesó un conectador ilegal en el parque José Martí, quien “trabaja”
allí entre ocho o diez horas al día y pidió el anonimato.
También reconoció que, a
veces, se trafican paquetes de horas limpias a 0.80 centavos cada una, pero que
él mismo no sabe de dónde salen. Agregó que la página de recargar es difícil su
acceso, él ofrece a los usuarios una aplicación hecha por un cubano para esos
trámites, claro si pagan.
Esas operaciones no son
únicas de esa zona, sino de todas las que hoy están conectadas a través de WiFi
en Cienfuegos, aun cuando ello pudiera atentar contra la seguridad informática
de quienes se conectan. No es lo mismo 1Mb/s para un usuario que compartir esa
misma velocidad entre seis dispositivos.
“La privacidad solo está en
la casa. El país tiene definidos proyectos que están encaminados a la
informatización de la sociedad, dentro de ellos se encuentra el de Internet a
los hogares, mas no tiene una fecha determinada”, sentenció Yusnel Díaz
Fernández, jefe del Grupo de Mercadotecnia.
Los encuestados insisten en
dejar claro que el servicio Nauta
puede mejorarse, pero nunca quitarlo. Bajo su sombra crecen hoy muchas formas
de enriquecimiento ilegal, las cuales parten del desconocimiento de los
usuarios y, por ende, de la poca información recibida por estos en los centros
de ETECSA. Cuando te haces partícipe del acto performático encuentras que
aunque parezca no es en blanco y negro…(Por Zularim Pérez Martí y Glenda Boza Ibarra, del periódico 5 de Septiembre)
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