Identidad, belleza y diversidad son calificativos que definen la intención y el resultado del trabajo del Fondo Cubano de Bienes Culturales (FCBC) en Cienfuegos y de los artistas y creadores a los cuales representa, con quienes comparte 25 años de compenetración, amores y diálogo.
La crítica Massiel Delgado sintetizó el
surgimiento de esta alianza en sabias palabras que quedaron registradas en la
prensa local: "A veces, la sociedad cienfueguera y la comunidad artística
disentíamos en algunos puntos respecto a la función del Fondo, porque introdujo
en el panorama cultural el mercado del arte: un fenómeno que, por lo menos
hasta los años '80, la Mayor
de las Antillas no conocía. Y hablamos de 'un mal necesario' que aquí, en
determinados momentos, entrañó ciertas dificultades para el proceso artístico,
en lo relativo a la pureza y autenticidad.